Movilización neuromeníngea vs estiramiento pasivo en la musculatura isquiotibial en futbolistas sanos de cantera
Autor/es
Aranda López, EnriqueDirector/es
Reyes Gil, FernandoFecha
2017Tipo de documento
masterThesisÁrea/s de conocimiento
FisioterapiaMateria/s Unesco
3213.11 FisioterapiaResumen
Introducción: La lesion muscular es uno de los mayores problemas para los
jugadores de fútbol, que representa del 20% al 37% de todas las lesiones debido
al tiempo perdido en el fútbol profesional y del 18% al 23% en el fútbol amateur.
La prevalencia de la rotura muscular del isquiotibial está entre el 8% y el 25%. El
objetivo de este estudio es verificar si la movilización neuromeníngea mejora la
flexibilidad isquiotibial en mayor medida que el estiramiento pasivo en jugadores
de fútbol sanos.
Métodos: Se trata de un ensayo controlado aleatorizado (ECA) con dos
intervenciones y una asignación aleatoria de los sujetos a un grupo control y a
un grupo experimental, prospectivo, transversal y simple ciego. Diecisiete
jugadores de fútbol sanos (edad=18,29 ± 0,47 años) fueron divididos
aleatoriamente en dos grupos. El primer grupo es el grupo experimental (n=9), la
intervención fue una técnica neurodinámica de deslizamiento para el nervio
ciático y la intervención para el grupo control (n=8) fue el estiramiento pasivo en
la musculatura isquiotibial. Se cogieron medidas pre-intervención y postintervención
de la flexibilidad isquiotibial (Prueba Seat&Reach), dolor o tolerancia
al estiramiento (EVA) y rango de movimiento de la cadera (SLR). El tipo de
análisis estadístico utilizado fue la prueba de Kolmogorov-Smirnov, la prueba de
Kolmogorov-Smirnov con la corrección de significación de Lillefors para ver si
cumplían los criterios de normalidad. La prueba Shapiro-Wilks se utilizó porque
el tamaño de la muestra era pequeño. Para analizar la homocedasticidad se
utilizó la prueba de Levene y T-student. La prueba no paramétrica usada fue la U
de Mann Whitney y el test de Wilcoxon.
Resultados: No hay diferencias estadísticamente significativas p>0,05 entre los
grupos. Por otro lado, entre los sujetos de cada grupo hay diferencias
significativas. En el grupo experimental hubo una mejora importante de la
flexibilidad isquiotibial (p=0,000), una mejora del rango de movimiento de la
cadera derecha y del rango de movilidad de la cadera izquierda (p=0,001) y
(p=0,040) respectivamente. En el grupo control hubo una mejora de la
flexibilidad isquiotibial (p=0,048).
Conclusiones: La movilización neuromeníngea no es más eficaz que el
estiramiento pasivo para ganar flexibilidad isquiotibial a corto plazo, sin embargo
ambas técnicas son efectivas para ganar flexibilidad en los isquiotibiales. La
principal limitación del studio es el tamaño de la muestra. Las futuras líneas de
investigación del presente estudio son la importancia del tejido conjuntivo, la
tension neural y la fascia como resistencias pasivas al estiramiento muscular, no
permitiendo al nervio que se deslice correctamente a través del tejido.